Más que una instalación para un video musical o un festival de arte contemporáneo, estos niños de 5to grado usan como sobreros gigantes estas cajas para protegerse y observar el eclipse solar de la primavera de 1963.
En la parte superior de la caja hay un pequeño agujero, por el que pasa un haz de luz que los niños ven, conforme progresa el eclipse la luz de hoyo también muestra el progreso de eclipse. De modo que se puede disfrutar el espectáculo sideral sin ver directamente al Sol, sin dañarse la vista.
Seguramente este tipo de invasiones de chiquillos cabeza de cartón solo aparece en los días de eclipse, por lo cual se puede inventar una leyenda urbana: “cuando veas niños con cabeza de carto, cuidado, los cielos se oscurecerán y el Sol desaparecerá” (LoL).
Via:
Hola. Aquí hay una historia (es de un programa chileno de humor de los 90') de un niño cabeza de caja.
ResponderBorrarChau.
http://www.youtube.com/watch?v=ym69TgCCx7k